Ahh estas fechas

No se muy bien que les pasa a ustedes cuando llega esta época del año (me gustaría saberlo), a mí me produce casi siempre un estado bluer than blue. Quizá sabores de la madalena proustiana relacionada con mi infancia y con la presencia real de muchos de mi seres más amados.
Pero este año, como bien lo contó Ire en su bloga, después de 12 años de estar juntas compramos un arbolito de navidad (menos de medio metro) y lo armamos ayer con unos adornos que vienen sobreviviendo de distintos tiempos.
Este año realmente deseaba tener un arbolito: ver esos colores, ese verdecito, dar un aire arcoiris al living. Así que allí está. Y esta vez estoy como más contenta, viviendo con el corazón puesto más en mis amadas presentes: Ire y las gatas y también mi tía Chichita. Ellas son mi familia. A las/os ausentes los tengo en mi corazón, pero no quiero saudade.
Después está la familia electiva que está esparcida por Temperley, Montserrat (barrio de Baires), Mendoza y Neuquén. Medio difícil de juntarse, je!
Aquí estaremos, en la casa. Hemos podido comprar algunas cositas dulce.... de choco!!! y eso ya levanta la endorfina! ja!... o ¿no?